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Incienso. Magia. 2



La magia y los inciensos


Bien es sabido que en muchos rituales el incienso constituye uno de los elementos imprescindibles, no sólo por la vibración que provoca al quemarse y el aroma que desprende, sino también por la facilidad con la que llega a impregnar todo el ambiente, creando una atmósfera ideal para conectar más fácilmente con las energías del entorno.


En el transcurso de este mágico suceder del hombre y al irse convirtiendo en ese algo que busca la trascendencia espiritual; descubrió y utilizó el incienso como una especie de plegaria, lo hizo parte de su práctica ritual; inatrapable como el viento, lo vio ascender con su petición; mezcló hierbas, seleccionó maderas y al colocarlas entre las llamas fue parte de ellas en su anhelo de remontarse en ese viaje mágico. Concibió una escalera sagrada, por la cual, todos los pueblos antiguos trataron de llegar a Dios.


Lo hizo parte de la historia humana, lo quemó en multitud de ofrendas, sirvió para sus ritos de iniciación y nos brindó con su aroma desde hace siglos. El poder del incienso reside, por una parte, en sus sutiles vibraciones, y por otra, en su aroma. El incienso también enriquece cualquier ritual; el incensario destaca sobre el altar y las tenues columnas de humo se entrelazan, creando una atmósfera mágica y misteriosa.


Se quema al hacer magia con el fin de estimular la conciencia ritual, es decir, el estado de ánimo preciso para despertar y dirigir la energía personal; es una valiosa ayuda para nuestros hechizos y conjuros, ya que al elevarse el humo, se cree que lleva el mensaje directamente a las deidades que se imploran o invocan; cuando el incienso se quema con anterioridad a los trabajos mágicos, su humo perfumado purifica también el altar y el área circundante, alejando las vibraciones perturbadoras y negativas; hay que tener presente que es uno de los mejores purificadores que existen y no debemos de olvidar que purificar quiere decir limpiar de energías perjudiciales todo aquello que nos rodea, ya se trate de personas, animales o incluso lugares; se queman inciensos con fórmulas especiales con el fin de atraer ciertas energías específicas hasta el mago y ayudarlo a cargar su poder personal con la finalidad del ritual, para producir finalmente el cambio necesario.


Cuando el incienso arde sin llama en el lugar donde se celebra el ritual sufre una transformación. Las vibraciones dejan de estar atrapadas en su forma física y se liberan penetrando en el medio ambiente. Estas energías se mezclan con las del mago y se apresuran a llevar a cabo los cambios necesarios para la manifestación del objetivo mágico. Pero en general, cualquiera que sea su fragancia, se puede utilizar incienso para: Purificar, meditar, atraer paz y armonía; bendecir un lugar; acentuar cualidades, estados de ánimo y sentimientos; protección, éxito y prosperidad; fines curativos.


Existe una gran variedad de inciensos que varían según el color, el aroma, la forma (espiral, conos, en grano, o varillas huecas y macizas) y sus propiedades. Posee grandes poderes espirituales y dependiendo del estado de ánimo y del entorno que se quiera crear, podemos usar uno u otro. Algunos facilitan la concentración y la meditación, otros atraen la energía positiva, purifican y liberan el entorno y a las personas de las malas influencias, etc.


Para quemar incienso sólo debemos buscar un rincón especial, colocarlo en un recipiente adecuado según su forma, y encenderlo con una cerilla de madera.



A continuación, una breve descripción de algunos de los inciensos más utilizados y sus propiedades:



Incienso Benjuí: protege, purifica, aumenta la prosperidad, y borra los pensamientos negativos. Se recomienda quemar en fase de luna nueva después de un incienso de ruda.


Incienso de canela: gran potenciador sexual, atrae el amor y estimula la pasión en la pareja. Ayuda a tener un mejor bienestar interior y económico, a ser más tolerantes y a conseguir cualquier proyecto. Se considera que ayuda a curar la debilidad, la gripe, la anorexia y la impotencia.


Incienso de coco: se utiliza para abrir caminos, conseguir fertilidad, estimula la creatividad, y aumenta el buen humor.


Incienso de eucalipto: potente purificador, limpia y neutraliza las energías negativas, ayuda a eliminar la depresión y la nostalgia, favorece la concentración, proporciona una sensación relajante y liberadora, atrae el bienestar, y ayuda a descongestionar las vías respiratorias.


Incienso de jazmín o reina de la noche: en la antigua Persia era considerada una planta sagrada. Su aroma afrodisíaco en incienso atrae prosperidad, genera ideas positivas, calma dolores de cabeza y dulcifica las relaciones amorosas.


Incienso de lavanda: se emplea para atraer la buena suerte, el éxito, y para alejar la negatividad. Equilibra nuestras energías ayudando a la relajación, aporta optimismo, calma el dolor de cabeza, el estrés, la histeria, la neurosis y la ansiedad.


Incienso de limón: se utiliza para limpiezas energéticas, para obtener claridad de pensamiento y claridad en el trabajo. Aporta frescura emocional, ayuda a superar y evitar la depresión, y calma la ansiedad y los mareos. Muy recomendado para estudiantes.


Incienso de miel: facilita las relaciones amorosas, estimula la sensibilidad, endulza situaciones y atrae paz y dinero.


Incienso de mirra: su aroma alivia la apatía y nos incentiva a llegar a nuestra meta. Actúa como protector, purificando el lugar donde se quema y proporcionando paz. Es usado en meditación, y para alejar la negatividad y consagrar los elementos de un ritual.


Incienso de pachuli: su aroma energizante y afrodisíaco ayuda a atraer el dinero, a ahuyentar los miedos, agudiza el ingenio, nos levanta el ánimo, y nos aporta beneficios en elevaciones espirituales.


Incienso de palo santo: se utiliza para limpiar y obtener claridad mental, ayuda a entrar en un estado de meditación y sueño. Reduce el estrés, la tensión musculosa y levanta el ánimo.


Incienso de pino: su aroma a fortalecer el espíritu en malos momentos emocionales. Limpia, purifica, refresca y carga de energía cualquier ambiente que tenga mala energía. Ayuda a los procesos curativos y en rituales para atraer dinero.


Incienso de romero: potente limpiador de malas energías, se utiliza para atraer lo bueno, alejar lo malo, y en exorcismos. También es efectivo en la protección personal.


Incienso de ruda: considerado como el mejor purificador, se utiliza para romper cualquier maleficio, mal de ojo, y para limpiar el ambiente del hogar o negocio, a la persona, o a cualquier objeto que esté cargado de energías negativas y envidias.


Incienso de sándalo: se utiliza en rituales de protección y limpieza, para resolver problemas empresariales y financieros, romper lazos, y para alejar a los espíritus y fuerzas negativas. Su aroma afrodisíaco purifica, relaja y atrae bienestar, prosperidad, paz y suerte. Muy útil para los estados de insomnio.


Incienso de salvia silvestre: es utilizada para proteger y purificar lugares y personas, aportando la tranquilidad que necesitan.


Incienso de vainilla: se utiliza para avivar el amor, superar la ansiedad y los estados de ira, depresiones y estrés. Aporta energía, disuelve el odio, la frustración y la cólera reprimida.


Las propiedades mágicas del incienso purifican y armonizan tanto hogares, ambientes y objetos, como las energías mentales y emocionales de las personas, sólo debes dejarte guiar por tu intuición a la hora de elegirlo y usarlo con buena intención.


Fuente: minubemagica.com



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